Tesla se asoma a la puerta

Ahora que estoy dando los últimos toques a la app sobre Nikola Tesla que vengo preparando en las últimas semanas, he estado repasando algunas de las fotografías que existen sobre el genio de la electricidad. No son muchas, ciertamente, pero sí hay algunas realmente sorprendentes. Tesla no gustaba de ser fotografiado mientras trabajaba. En cambio, estaba encantado de ser fotografiado cuando podía controlar la puesta en escena, preparando todo minuciosamente. Precisamente por eso, ésta es mi fotografía favorita de Tesla, «pillado» de forma furtiva en plena tarea inventiva. (Pincha en la imagen para ampliar).

El cartelillo de aviso de peligro tiene su encanto y, claro está, el pícaro esbozo de sonrisa de Tesla es impagable. La imagen fue tomada en el verano de 1899, cuando Tesla se encontraba en un laboratorio instalado en medio de la nada a las afueras de Colorado Springs. Pasó allí prácticamente encerrado varios meses ocupado en diversos experimentos que todavía hoy siguen siendo enigmáticos en gran parte. Su mayor preocupación consistía en averiguar cómo transmitir energía eléctrica a través del aire y la tierra. En ese lugar, que de lejos parecía un granero mal construido con una antena sobresaliendo del tejado, Tesla afirmó haber recibido señales del espacio en lo que bien pudo haber sido la primera experiencia de radioastronomía de la historia. Bien, sigamos montando la app, ya queda menos…